Pastel de verduras con langostinos y queso
Esta receta que os presento hoy ofrece varias posibilidades, además de que resulta muy rica y nada pesada. Podemos servirla como una entrada ligerita, o bien como unos pinchos formando parte de una cena o comida a base de aperitivos, por ejemplo. A vuestra elección lo dejo.
INGREDIENTES
- 3 patatas medianas, cortadas en rodajas como si fueran para tortilla o un poco más gruesas
- 1/2 berenjena mediana, cortada en daditos
- 1 cebolla pequeña, troceada fina
- 1/2 pimiento verde, en trozos pequeños
- 1/2 pimiento rojo, en trozos pequeños
- 1/2 calabacín mediano, en daditos
- langostinos (o gambas) al gusto, pelados, bien limpios y cortados en trozos
- un trocito de queso manchego fresco, cortado en daditos (podríamos usar también queso feta, por ejemplo)
- 8 huevos tamaño L
- aceite, para freir
- sal
PREPARACIÓN
- En aceite no muy caliente (más bien fuego medio-suave), freimos las patatas hasta que estén tiernas pero no lleguen a deshacerse las rodajas (casi como si fuésemos a confitarlas). Retirar de la sartén y reservar aparte. Cuando estén casi frías, las cortamos en daditos (o podemos dejarlas en rodajas si queremos).
- Rehogamos las verduras a fuego medio-bajo hasta que queden al dente, no demasiado blandas. Procuraremos que no nos queden jugos y, al mismo tiempo, que no se nos tuesten.
- Agregamos los langostinos (o gambas) a las verduras y dejamos un minuto o dos, que se hagan ligeramente. Reservar en un recipiente aparte hasta que el sofrito pierda temperatura.
- Batimos los huevos y les incorporamos las verduras y el queso. Sazonamos.
- Engrasamos con aceite un recipiente apto para horno. Yo uso un recipiente rectangular (20*30cm aprox., adaptable a lo que tengas en casa) y presento porciones cuadradas o versión pincho, pero las posibilidades son muchas. Verás que la altura de la mezcla te queda como la de una tortilla de patatas (o algo menos).
- En el recipiente, vierte una primera capa de la mezcla de huevos y, sobre ella, dispón una capa de patatas. Continúa así hasta terminar con todo. Al final, alisa la superficie con una espátula y cubre el recipiente con papel de aluminio.
- Introduce en el horno a 160ºC, altura media, durante unos 20 – 30 minutos (dependerá de los hornos). Tendrás que vigilar que el pastel no vaya cuajando demasiado por abajo. En los últimos minutos retira el papel de aluminio y, si fuera preciso, sube el pastel a una altura superior para que termine de cujar la parte de arriba.
- Cuando haya cuajado, sácalo inmediatamente y desmolda en frío, despegándolo de las paredes si fuera necesario (según el molde/recipiente que hayas usado). Sívelo como entrantes, o como pequeños pinchitos.